La colaboradora de ‘Sálvame’ asegura que le están chantajeando antes de las valoraciones oficiales de la OCU
Belén Esteban es consciente de que el mundo de la televisión es muy cambiante y que podía quedarse sin trabajo en cualquier momento. Ahora que ya es mayor, ha querido abrirse puertas fuera de Telecinco por si acaso. ¿Y en qué? Hace unos años decidió que probaría suerte en la industria alimentaria con una empresa de productos con su nombre. Lo primero que sacó fue el gazpacho y el salmorejo, ambos hechos a partir de la receta de su madre. En el envase se puede ver una fotografía suya, todo un reclamo para los miles de fans que tiene desde que empezara a aparecer en antena.
¿Cuál es el problema? Que cada año la OCU valora sus productos y, en esta ocasión, no les han puesto nada bien. Ella, muy enfadada por su valoración, ha denunciado públicamente estar siendo víctima de una campaña contra ella: “Quieren perjudicar mis productos y me parece lamentable. Lo que no hará Sabores de la Esteban es pagar dinero para que hablen bien de sus productos. Belén Esteban no pagará ningún chantaje”, ha declarado con contundencia.
Estas declaraciones parecían dejar caer que los miembros de la Organización de Consumidores y Usuarios le estaban pidiendo dinero a cambio de hablar bien de su gazpacho. ¿Es así? “Me piden dinero desde hace dos años, pero no diré quién. Qué casualidad que lleve dos años criticando… Lo que tenemos que soportar”.
La OCU reacciona a las acusaciones de Belén Esteban
Ahora es la OCU quien ha respondido a estas graves acusaciones: “No nos damos por aludidos. Por supuesto que nunca le hemos cobrado a nadie a cambio de una buena nota. Nosotros hacemos los rankings a petición de los consumidores para que los gazpachos y los salmoreos son productos este verano”, dicen en Lecturas. Entonces, a quien se refiere la colaboradora de Sálvame? ¿Quién le pide dinero a cambio de valorar positivamente sus productos? Por el momento es un misterio, pero lo que queda claro es que la tertulaina necesita buena publicidad para un negocio en el que confía de cara a la jubilación una vez deje la televisión.