El Tribunal Penal Internacional ordena detener a Putin
El Tribunal Penal Internacional (TPI) ha emitido este viernes una orden de detención contra el presidente de Rusia, Vladimir Putin, por un presunto crimen de guerra por la deportación ilegal de niños ucranianos de las zonas ocupadas de Ucrania hacia territorio ruso. Tal y como se ha dado a conocer en un comunicado, el tribunal de La Haya también pide que se detenga a la comisaria presidencial de los derechos de la Infancia de la Federación Rusa, María Alekseievna Lvova-Belova, por el mismo motivo.
Putin «tiene responsabilidad individual»
La corte internacional señala que existen “motivos razonables” para acusar a Putin de tener “responsabilidad penal individual” por estos delitos, ya sea por haberlos cometido de forma “directa” o por no haber podido “ejercer un control adecuado sobre los subordinados civiles y militares” que cometieron estas deportaciones forzadas de menores ucranianos. En el caso de Lvova-Belova, el TPI le acusa de ser responsable de los mismos crímenes “por haberlos cometido directamente, sea con otros individuos oa través de terceros”.
La cámara detalló en el comunicado que estas órdenes de detención se mantuvieron en secreto para preservar la seguridad de las víctimas y proteger la investigación. Ahora bien, viendo que los crímenes no se detienen, la corte ha decidido hacerlas públicas y espera que este anuncio contribuya a prevenir nuevos delitos. Estas órdenes son los primeros cargos internacionales presentados contra Putin desde el inicio del conflicto y llegan después de una investigación liderada por el jefe del TPI, Karim Khan, que se ha alargado durante meses.
Rusia lo desmiente
Ante las acusaciones de Kiiv y sus aliados, el Kremlin ha desmentido constantemente que se esté deportando a niños de zonas de Ucrania hacia territorio ruso de forma ilegal. Aún así, el gobierno de Volodímir Zelenski cifra en unos 16.000 los niños que han sido desplazados hacia Rusia en contra de su voluntad desde que empezó la guerra, hace algo más de un año. Sin embargo, esta información cambia en un informe de febrero de la Universidad Yale, el cual señala que al menos 6.000 menores ucranianos han sido repartidos en 40 internados rusos.