El tertuliano explica qué hay detrás del impactante cambio físico experimentado
José Antonio Avilés no se caracteriza por su sinceridad, pero este fin de semana ha querido abrirse y realizar un ejercicio de transparencia en Viva la vida. El colaborador de Telecinco, que recibió muchas críticas al saber que no tenía el título de periodismo, que había estafado a varias personas y que se había inventado la muerte de la abuela para posponer ciertas reuniones. Su credibilidad está bajo mínimos desde entonces, pero él sigue ocupando una silla en el magacín y de vez en cuando va soltando información sobre los famosos. Pero en esta ocasión ha hablado sobre sí mismo. El impactante cambio físico que experimentó en Supervivientes hizo hablar mucho, ya que llegó a adelgazar 23 kg. Parece que ha logrado mantenerse en el peso y por eso ha compartido su método, lo que no es sencillo teniendo en cuenta que padece una enfermedad.
“Me he adelgazado más de 20 kg, pero no por gusto. Tengo un grave problema con el peso. Tengo el hígado graso y cuando supero los 90 kg mi cuerpo empieza a engordarse y engordarse, mi metabolismo se ralentiza y lo que a ti te engorda un pastelito, a mí me engorda el triple”, explica. El tertuliano pesaba 101 kg, lo que le provocaba muchos problemas de salud. Para no volver a llegar a este extremo, ha decidido someterse a una operación que le puede ayudar a mantenerse en su peso ideal: “Hace unos meses me puse un balón intragástrico y estoy muy contento con mi cambio, que ha sido necesario por salud”.
Esto explica el porqué del cambio físico tan exagerado que ha experimentado en estos años. Él no puede estar más contento con el resultado, lo que le estiliza más y también le ayuda a encontrarse mejor gracias a evitar los problemas de salud que tantos quebraderos de cabeza le han dado desde hace un tiempo.
.