«El portavoz de Idealista, Francisco Iñareta, asegura que este informe nuevamente revela el impacto negativo de la Ley de Vivienda en el sector inmobiliario.»
El costo del arrendamiento, medido en función de los ingresos, continúa aumentando en comparación con la compra de viviendas. De acuerdo con un estudio exhaustivo publicado por Idealista, el mercado inmobiliario en España presenta un panorama complejo, especialmente marcado por el encarecimiento de los alquileres. Este incremento, en gran medida atribuido a la disminución de la disponibilidad de viviendas, ha generado un impacto directo en los requisitos económicos necesarios para acceder a una vivienda en alquiler.
Según el informe de la plataforma inmobiliaria, para alquilar una vivienda de dos dormitorios sin exceder el 30% de los ingresos recomendados, se requiere un ingreso anual neto de 31.550 euros. Esta cifra representa un importante aumento del 46% en comparación con los ingresos necesarios para la cuota hipotecaria al comprar la misma vivienda, que se sitúa en 21.561 euros netos, a los que se deben agregar ahorros mínimos de 43.467 euros.
Valencia encabeza la lista de diferencias entre los ingresos necesarios para el alquiler y la compra, con un 56% de diferencia. Le sigue de cerca Barcelona con un 39%, Sevilla con un 33%, Bilbao con un 32%, Madrid con un 24% y Málaga con un 15%.
Por otro lado, ciudades como San Sebastián y Palma muestran una peculiaridad notable: los ingresos familiares necesarios para el alquiler son menores que los necesarios para la compra, con una diferencia del 12% y 10% respectivamente. Sin embargo, esta situación es una rareza, ya que solo se repite en Granada con un -3%.
El mayor desafío se presenta en Huelva, donde los ingresos necesarios para el alquiler son un abrumador 81% más altos que para la compra. A continuación, se encuentran Lleida con un 77%, Jaén con un 71% y Murcia con un 66%.
En términos de ingresos necesarios para el alquiler, Barcelona lidera la tabla con 59.125 euros netos, seguida por Palma con 51.002 euros netos, Madrid con 50.835 euros netos y San Sebastián con 47.573 euros netos. Por otro lado, solo seis capitales exigen ingresos familiares netos inferiores a los 14.000 euros anuales para la compra de una vivienda, siendo Jaén la más accesible con 11.873 euros netos.
La complicación central para acceder a la compra de una vivienda radica en los ahorros necesarios para la entrada, que representa el 20% del valor de tasación y el 10% de los gastos e impuestos. En esta categoría, Palma encabeza la lista con una cifra asombrosa de 114.211 euros, seguida de cerca por San Sebastián con 108.817 euros. Por otro lado, Jaén requiere la menor cantidad de ahorros con 23.936 euros, seguida por Huelva con 25.501 euros y Palencia con 26.309 euros.
Francisco Iñareta, portavoz de Idealista, destaca que este informe pone de manifiesto una vez más el perverso efecto de la Ley de Vivienda en el mercado inmobiliario, que ha dificultado el acceso a la vivienda tanto en alquiler como en venta. Los datos resaltan que los ingresos necesarios para comprar una vivienda, siguiendo las recomendaciones financieras, son mucho más bajos que los necesarios para alquilar la misma propiedad, pero es necesario aportar una cantidad considerable de ahorros. Iñareta también señala que la alta demanda continúa ejerciendo presión sobre los precios, lo que eleva la carga financiera para los inquilinos y limita su capacidad de ahorro. Para romper este ciclo, Iñareta sugiere un cambio en las políticas de alquiler que aumente significativamente la oferta de viviendas, aliviando la presión sobre los precios y facilitando la capacidad de ahorro de las familias para futuras compras.