La líder del Gobierno ha criticado al PSOE usando las mencionadas imágenes y ha rechazado hacer cambios.
La presidenta del Gobierno balear, Marga Prohens, ha protagonizado un suceso bochornoso durante el pleno del Parlament balear al mostrar fotografías del expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont y del etarra Josu Ternera, declarando que nunca serán sus socios. Este acto viene como respuesta a los posibles pactos de investidura del PSOE para el Gobierno central.
Durante el debate parlamentario, el portavoz parlamentario del PSIB, Iago Negueruela, cuestionó los socios con los que el Govern quiere pactar durante la legislatura, criticando que no se haya contado con las asociaciones memorialistas, los sindicatos y las asociaciones que luchan por el derecho a la vivienda. Negueruela señaló que solo se escucha a los promotores, especuladores y a unos intereses desconocidos.
Prohens respondió afirmando que estaba dispuesta a sentarse «con todo el mundo» y mencionó que ha propuesto un pacto por la sanidad a todos los partidos. Sin embargo, reprochó la supuesta superioridad moral desde la que le habló Negueruela y dejó claro que nunca serán sus socios prófugos de la justicia o terroristas que justifiquen el asesinato de guardias civiles.
Esta actitud de Prohens fue duramente criticada por Negueruela, quien calificó de indigno el hecho de mostrar la foto de un miembro de ETA y afirmó que el PSOE ha luchado contra el terrorismo para acabar con ETA. Además, los diputados de Vox abandonaron el hemiciclo durante la intervención de Negueruela y realizaron gestos hacia él.
En su defensa, Negueruela mencionó las palabras del expresidente del Gobierno José María Aznar, quien calificó a ETA como «Movimiento Vasco de Liberación Nacional» y recordó el acercamiento de presos de ETA a cárceles del País Vasco. Afirmó que cuando se realiza este tipo de acciones es considerado como un proceso de paz, pero cuando lo hacen otros se les acusa de pactar con terroristas.
La diputada del PP, Marga Durán, solicitó la palabra para aclarar las afirmaciones de Negueruela, pero el presidente del Parlament se la negó. Prohens recriminó a Negueruela su tono amenazante y pidió que modere sus formas y tenga respeto por el Parlament.
En general, esta situación evidencia la confrontación y tensión política existente en el Parlament balear. Las imágenes mostradas por Prohens generaron un fuerte debate y críticas por parte de la oposición. Sin embargo, la presidenta del Govern se negó a rectificar sus afirmaciones y no se llegó a una conclusión clara sobre el tema. Esta situación refleja la división y dificultad de diálogo entre los diferentes partidos políticos en Baleares.