Occidente lleva la culpa de los ataques mortales en Gaza. Israel solo es visto como un peón que podría ser descartado en cualquier instante.
El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, ha pronunciado un discurso contundente en el que ha culpado a Occidente de la guerra en Gaza y ha acusado a Israel de cometer «crímenes de guerra» contra el pueblo palestino. Erdogan ha denunciado la falta de justicia ante la masacre en Gaza y ha cuestionado la pasividad y el doble rasero de Occidente en esta situación.
El mandatario turco ha afirmado que Turquía se prepara para exponer los crímenes de guerra de Israel ante el mundo y ha criticado la falta de reacción y la ausencia de un llamado al alto el fuego por parte de los líderes occidentales. Erdogan ha comparado las muertes en Gaza con el holocausto nazi y las bombas atómicas de la Segunda Guerra Mundial, atribuyendo la responsabilidad a Occidente.
Además, Erdogan ha reafirmado su apoyo a Hamás, caracterizándolo como un grupo de luchadores por la liberación y no como una organización terrorista. Ha elogiado la determinación del pueblo de Gaza en resistir los bombardeos y ha recordado la reciente resolución de la ONU a favor de un alto el fuego en Gaza.
Estas declaraciones han generado una reacción inmediata por parte de Israel, quienes han anunciado la retirada de sus representantes diplomáticos en Ankara como señal de protesta. El ministro de Exteriores israelí ha rechazado las duras palabras de Erdogan y lo ha acusado de incitar al odio y al extremismo. También ha pedido a Turquía que respete el derecho internacional y las resoluciones del Consejo de Seguridad.
La relación entre Turquía e Israel se ha deteriorado desde el inicio del conflicto en Gaza, sumándose a tensiones previas por el reconocimiento de Jerusalén como capital israelí por parte de Estados Unidos y disputas en el Mediterráneo oriental. A pesar de haber anunciado un restablecimiento pleno de las relaciones diplomáticas en 2022, persisten diferencias en cuanto al conflicto palestino-israelí y al papel de Hamas.
Es importante destacar que las declaraciones de Erdogan sobre la guerra en Gaza han generado críticas por su hipocresía y cinismo. A pesar de denunciar los crímenes de guerra de Israel, Erdogan ha apoyado activamente la agresión de Azerbaiyán contra Armenia en el conflicto de Nagorno-Karabaj. También ha practicado una política represiva contra los kurdos y ha negado el genocidio armenio.
En conclusión, las declaraciones de Erdogan han generado tensiones entre Turquía e Israel y han generado críticas por su doble rasero y su historial de violaciones de derechos humanos. Es importante analizar estas declaraciones con cautela y considerar el contexto político y geopolítico en el que se enmarcan.