La decisión sobre la calificación del texto será tomada mañana por la Mesa del Congreso durante su reunión.
La Secretaría General del Congreso, liderada por Fernando Galindo, ha reconocido la existencia de posibles motivos de inconstitucionalidad en la proposición de ley de amnistía presentada por el PSOE. Sin embargo, asegura que no hay una contradicción tan evidente con la Carta Magna como para impedir su tramitación. Por lo tanto, los letrados del Congreso han dado luz verde a la tramitación de esta ley.
En el informe presentado, se destaca que la iniciativa no entra en contradicción evidente y palmaria con el artículo 62, letra i de la Constitución, que prohíbe los indultos generales. Esto contrasta con la amnistía presentada por los independentistas en 2021, que sí incumplía esta disposición constitucional.
No obstante, los letrados también reconocen que el Tribunal Constitucional podría encontrar algunos incumplimientos del texto en el futuro, dependiendo de su interpretación. A pesar de esto, el trámite de calificación y admisión a trámite de las iniciativas parlamentarias no implica un control previo de constitucionalidad, por lo que la no calificación de una iniciativa es excepcional.
En otro orden de noticias, Félix Bolaños, uno de los padres de la ley de amnistía, se ha convertido en un «superministro» al asumir también la cartera de Justicia. Bolaños, quien previamente se desempeñaba como ministro de la Presidencia y Relaciones con las Cortes, ha estado involucrado en las principales negociaciones relacionadas con el ámbito de la Justicia. Como resultado, llevará uno de los cargos con más peso del Ejecutivo, con competencias propias de un vicepresidente político, aunque no tenga formalmente ese puesto.
Bolaños, madrileño de 47 años, se unió al Gobierno en junio de 2018 como secretario general de la Presidencia, pero fue en julio de 2021 cuando asumió el Ministerio de la Presidencia. Antes de su ingreso al Gobierno, trabajó como Letrado del Banco de España y como abogado del despacho Uría Menéndez. Durante su mandato como ministro de la Presidencia, ha liderado las negociaciones con otras fuerzas políticas y ha formado parte del equipo negociador del PSOE para sacar adelante acuerdos con Junts y ERC, que incluyen una ley de amnistía.
La proposición de ley presentada por el PSOE tiene por delante un recorrido parlamentario que se prevé más largo debido a las posibles enmiendas y a la reforma del Reglamento del Senado realizada por el PP para dilatar los plazos. Esta tramitación parlamentaria y la gestión de la ley de amnistía serán los principales desafíos para Bolaños en su nuevo cargo como ministro de Justicia.
Es importante destacar que la decisión sobre la calificación del texto se tomará este martes en la reunión de la Mesa del Congreso. Esta decisión marcará el rumbo de la tramitación de la ley y su viabilidad en el marco constitucional.