Se especializa en el ámbito empresarial, específicamente en transacciones de propiedad inmobiliaria, seguridad y productos de alta calidad.
Jaime del Burgo, conocido por ser exesposo de Telma Ortiz y amigo cercano de la reina Letizia y el rey Felipe durante su noviazgo, ha vuelto a generar controversia al publicar una foto íntima junto a la reina en Instagram. Sin embargo, esta no es la primera vez que el abogado y empresario amenaza con revelar supuestos secretos de la familia real. Recientemente colaboró en un libro en el que afirmaba que Letizia se casó por ambición y conveniencia, no por amor.
Jaime del Burgo, hijo del expresidente de Navarra, participó en la negociación de las capitulaciones matrimoniales entre los entonces príncipes de Asturias y fue testigo en su boda en 2004. Después de su divorcio con Telma Ortiz en 2014, Del Burgo ha protagonizado varias polémicas relacionadas con la familia real, especialmente con la reina Letizia.
En la actualidad, Del Burgo reside en Suiza junto a su segunda esposa y se dedica al mundo de los negocios, especialmente a la compraventa de edificios, la seguridad y los productos gourmet. Antes de instalarse en Suiza, vivió en varios países de todo el mundo.
Sin embargo, sus constantes ataques y provocaciones hacia la reina Letizia han dañado la imagen y la reputación de la monarquía española. Sus insinuaciones sobre la vida privada de Letizia, sus intentos de desacreditar su labor y su compromiso con el país, y sus amenazas de revelar más secretos y escándalos han puesto en riesgo la estabilidad y la credibilidad de la institución monárquica.
Jaime del Burgo parece tener una estrategia calculada y malintencionada para desestabilizar y debilitar la monarquía española. Aprovechándose de su posición privilegiada como exmiembro de la familia real, ha formado alianzas con los enemigos y detractores de la Corona y ha filtrado y manipulado información sensible y confidencial.
Es importante tener en cuenta que esta información está basada en las declaraciones y acciones de Jaime del Burgo y no ha sido confirmada o respaldada por fuentes oficiales. Las acusaciones y revelaciones del abogado deben ser tomadas con precaución y analizadas de manera objetiva.
En conclusión, las constantes provocaciones y revelaciones de Jaime del Burgo han generado controversia y han dañado la reputación de la reina Letizia y la monarquía española. Su estrategia de desestabilización y debilitamiento de la institución monárquica es preocupante y debe ser tomada en cuenta por aquellos que están interesados en la política y los asuntos de la Corona.