El actor de TV3 triunfa internacionalmente y presume de estar viviendo un sueño
Quim Gutiérrez está de enhorabuena. El actor catalán, al que conocimos en TV3 con Poblenou y El corazón de la ciudad, tiene cuatro películas pendientes de estreno y ha sido padre recientemente. La vida le sonríe, de lo que ha presumido en una entrevista muy completa con Jordi Basté en RAC1. El objetivo era presentar el recién estrenado filme francés, Madeleine Collins. Ésta no es la primera película que graba allí, un país que le ha acogido con los brazos abiertos desde que aprendió a hablar francés en el 2008: “Me apunté en francés para intentar abrirme mercado allí, puesto que es una industria que queda mucho más cerca de casa que la de Hollywood”. Esto no quiere decir que haya renunciado a actuar en Los Ángeles, lo que hizo el pasado año de la mano de Jungle Cruise: “Disfruté muchísimo, fantástico… aunque no a nivel interpretativo porque tuve un papel secundario”.
El último rodaje ha coincidido con el nacimiento de su primer hijo, un niño al que ha llamado Bruno. Lo ha tenido con la modelo Paula Willems, 17 años menor que él. Ahora que han pasado un par de meses, reflexiona sobre una paternidad que encuentra sencilla si la compara con el trabajo de actor: “He hecho rodajes de noche, los que son una salvajada… Durante dos semanas o tres, cambias el ciclo de sueño totalmente porque empiezas a trabajar a las siete de la tarde y vas a dormir a las 7 de la mañana. Así que compaginar el sueño con la paternidad me resulta muy sencillo”.
Y de ahí, pasa a revelar una anécdota con Pau Gasol que ha hecho mucha gracia a Jordi Basté: “Coincidí con él en un campus de verano cuando éramos pequeños y con él viví mi anécdota deportiva más ridícula… Mi equipo había llegado a dieciseisavos de final cuando nos enfrentamos a un equipo que se llamaba Forrest Pau. Pensamos que serían unos imbéciles y, de repente, nos encontramos a Pau Gasol delante… No se movió de la línea de 3, él solo nos hizo caldo con triples”.
.