Las presentadoras trabajan juntas en un programa de Telecinco en el que demuestran que se tienen mucho cariño
Sandra Barneda y Nagore Robles están trabajando juntas en Pesadilla en el paraíso, Lo que ha devuelto su relación en la prensa rosa. Las presentadoras fueron pareja durante seis años, pero el amor se acabó. Han quedado como buenas amigas y no dudan en manifestar públicamente el cariño que todavía se profesan. En directo se ríen y se envían dardos envenenados que hacen gracia a los telespectadores porque evidencian que se llevan muy bien. Este miércoles, la escritora barcelonesa ha hablado precisamente al respecto en un acto promocional de una marca de teléfonos.
¿Y qué ha dicho? Lecturas le ha preguntado directamente cómo es tener que trabajar con su ex pareja: “Ella es presentadora y yo soy presentadora, al final, así que tenemos la complicidad que tendríamos entre presentadores. El problema es que después hay más titulares para que nos miren con lupa, pero lo vivimos bien. Nos conocemos más y no hay ninguna indirecta, simplemente hacemos nuestro trabajo y disfrutamos mucho porque tenemos la suerte de que lo pasamos mucho con este trabajo y eso debemos agradecerlo siempre. Que Mediaset siga contando conmigo para otros formatos es un lujo y estoy dispuesta a todo en la cadena”.
También le han preguntado sobre su nueva relación de pareja con una bailarina neerlandesa, pero no ha querido dar muchos detalles: “No voy a hablar al respecto. Sólo diré que, por lo general, estoy feliz”.

Sandra Barneda promociona la mejor edición de La isla de las tentaciones
Sobre la Isla de las tentaciones, ha vuelto a insistir en que ésta será la mejor de las ediciones que han hecho hasta ahora: “Sólo hemos emitido dos programas y la gente ya está enganchada. Será una temporada muy loca porque te sorprende constantemente y la gente lo irá viendo. Este formato está bien montado y la gente se lo pasará bien”.
La periodista estaba en un acto promocional de una marca de móviles y lo ha aprovechado para explicar cómo utiliza ella la tecnología: “Yo cada vez uso más las videoconferencias, sobre todo desde la pandemia. Intento obligarme a llamar más que enviar mensajes de voz. Las llamadas que más ilusión me hacen son las de mi familia”.