Rocío Carrasco no se ha presentado en los juzgados y se ha tenido que cancelar la vista que le enfrentaba a su ex, Antonio David Flores. El tertuliano de televisión ha acudido con sus dos hijos que tiene en común con ella, Rocío y David Flores, posicionados a su favor en esta batalla judicial. El exmarido quiso denunciarla por un presunto delito de abandono de familia y la Fiscalía reclama un año de prisión para ella, además deuna multa entre 15.000 y 19.000 €. No le habría pasado la manutención de su hijo durante tres años, así que el joven se ha personado como parte denunciante.
El problema, como decíamos, es que Carrasco no se ha presentado en la sede judicial y la vista se ha cancelado aunque la parte denunciante sí estaba allí. No ha manifestado cuál ha sido la causa de su ausencia, así que el juicio deberá buscar una nueva fecha.
Rocío Flores estaba muy nerviosa antes de esa vista, en la que volvería a ver a la madre después de mucho tiempo. Ella misma ha manifestado que le ha hecho mucho daño y que, por su culpa, vive “una auténtica pesadilla” todos los días de su vida: “Nos hemos presentado en el juzgado y, por nuestra sorpresa, no estaba ella. He tenido una mañana brutal porque tenía que ser la primera vez que debería haberla visto y la verdad es que estaba bastante nerviosa”.
Rocío Flores asegura que no quería declarar contra la madre
Ella estaba citada como testigo, pero aseguró que había decidido que no quería declarar contra ella: “Mi postura siempre ha sido muy clara. Aunque me ha hecho daño y me ha destrozado la vida como ha hecho, siempre he mantenido la postura de que ella es mi madre y yo no declararía contra mi madre, es una decisión que se toma previamente y no la he tomado hoy”.
Lo cierto es que cuesta creer que no quisiera declarar contra ella cuando siempre le está criticando, pero esto ha manifestado públicamente a través de sus redes sociales.