La hija de Elena de Borbón se reencontrará con su antiguo tío y ha dejado claro que está encantada
Victoria Federica no es amiga de los periodistas y así lo ha demostrado en varias ocasiones, sobre todo con unas formas impertinentes y muy mala leche. Es por eso que la reportera deEuropa Press se ha sorprendido tanto cuando le ha visto más charlatán que nunca en una pequeña entrevista en plena calle. Quería preguntarle sobre el nuevo trabajo de Froilán, que tendrá un papel importante en la organización de la Cumbre del Clima de finales de año. Ella ha asegurado no saber nada sobre el tema, pero ha reconocido estar contenta al ver que su hermano está centrado en el trabajo: “No sé qué hará, la verdad, pero estoy muy feliz por él“.
La sorpresa de estas declaraciones ha llegado cuando ha dado información sobre la fiesta de cumpleaños de su prima, Irene Urdangarin. La chica cumple 18 años y la fiesta coincide, más o menos, con la graduación del Bachillerato. Por eso han querido organizar una fiesta familiar en la que se reencontrarán Cristina, Iñaki y los reyes eméritos Juan Carlos y Sofía. Victoria Federica también irá, por lo que ha dicho, y deja claro que no tiene problema en coincidir con el antiguo tío. No se sabe si ha vuelto a ver al exduque de Palma desde que saliera de prisión, pero al menos públicamente no lo había hecho.
Victoria Federica hace caso omiso a la petición de no hablar con la prensa
“No sé quién vendrá y quién no. Si viene mi abuelo, estaré encantadísima”. Le han preguntado qué le parece coincidir con su antiguo tío, Iñaki Urdangarin, y ella no se ha cortado un pelo: “Pues si viene, me parecerá igual de bien“. Esta respuesta no gustará en nada a Zarzuela, ya que Felipe y Letizia han intentado de todas las maneras que la familia se distanciara de él y, además, que Victoria dejara de hablar con la prensa. La chica no hace ni caso, eso está claro.
También es verdad que, desde un principio, Victoria Federica pedía que dejaran de perseguirla y hacerle preguntas visiblemente abrumada: «En serio, es que no me gusta eso». El estirón de orejas de la Casa Real se la llevará igualmente, teniendo en cuenta que ha hablado bien de la oveja negra de la familia y que ha vuelto a dar información a los periodistas.