El abogado del líder independentista ha vuelto a alegar una falta de imparcialidad por parte del juez, una opinión que ya había expresado anteriormente en varias ocasiones.
El expresidente de la Generalitat de Cataluña, Carles Puigdemont, ha presentado una solicitud al Tribunal Supremo para apartar al juez Pablo Llarena, quien está a cargo de la investigación en su contra por presunta desobediencia y malversación de fondos. Puigdemont alega falta de imparcialidad por parte del magistrado debido a sus declaraciones sobre la posibilidad de una amnistía para el proceso independentista.
En su escrito, la defensa de Puigdemont argumenta que varios medios de comunicación informaron sobre las declaraciones de Llarena el pasado 11 de septiembre, en las cuales cuestionó la constitucionalidad de una futura ley de amnistía. Según la defensa, estas declaraciones revelan un posicionamiento previo por parte del juez, lo cual compromete su imparcialidad. Además, critican al juez por mencionar la necesidad de verificar la legitimidad de una posible ley de amnistía.
La defensa de Puigdemont también señala que es desconcertante que la función jurisdiccional incluya ahora evaluar la legitimidad de las normas emanadas del Poder Legislativo. Consideran que esto demuestra una falta de imparcialidad por parte del magistrado-presidente, quien cuestiona la legitimidad de las normas que puedan promulgar los representantes del pueblo.
En este contexto, Puigdemont también impugnó la decisión de Llarena de consultar al Tribunal de Justicia de la Unión Europea sobre si el líder independentista había apelado la sentencia que le retiró la inmunidad europarlamentaria. Esta impugnación se suma a las solicitudes anteriores de Puigdemont para apartar a Llarena del caso.
Cabe mencionar que no es la primera vez que Puigdemont ha solicitado apartar a Llarena. En enero, cuando el magistrado decidió procesarlo, el expresidente catalán pidió su retirada del caso y que todas las decisiones tomadas desde que se convirtió en eurodiputado fueran anuladas. También solicitó que el caso fuera remitido a un juzgado de instrucción en Barcelona, argumentando que Llarena había ignorado la jurisprudencia establecida por el Tribunal Supremo y había creado una situación específica para los eurodiputados independentistas catalanes.
Por otro lado, Puigdemont ha dejado claro que no se siente concernido por las supuestas negociaciones entre ERC y el PSOE para una ley de amnistía. Ha destacado que no es miembro de ERC y, por lo tanto, no puede hablar por ellos ni sentirse concernido por sus acuerdos. Puigdemont ha subrayado que cada partido tomará sus propias decisiones.
En resumen, la defensa de Carles Puigdemont ha presentado una solicitud para apartar al juez Pablo Llarena del caso, argumentando falta de imparcialidad. Esta solicitud se suma a impugnaciones anteriores y refuerza la postura de Puigdemont de cuestionar la legitimidad de las normas y decisiones judiciales. Por otro lado, Puigdemont se ha desmarcado de las supuestas negociaciones de ERC para una ley de amnistía, destacando que cada partido tomará sus propias decisiones en este tema.